Cómo afecta el estrés al acné
A menudo pensamos que el acné se ve afectado principalmente por las hormonas, la dieta y las rutinas de cuidado de la piel, pero el estrés también puede desempeñar un papel importante en la aparición de brotes. Cuando estamos estresados, nuestros cuerpos liberan hormonas como el cortisol que pueden provocar un aumento de la producción de grasa, obstruyendo los poros y desencadenando el acné. Si controlas el estrés mediante cambios en tu estilo de vida, puedes ayudar a mantener tu piel más limpia y saludable. A continuación, te contamos cómo afecta el estrés a tu piel y qué puedes hacer para minimizar sus efectos.
1. El vínculo entre el estrés y la producción de petróleo
Cuando estás estresado, tu cuerpo produce más cortisol, una hormona que hace que las glándulas sebáceas de tu piel produzcan más grasa. Este exceso de grasa puede obstruir los poros, lo que provoca puntos negros, puntos blancos y brotes más graves. El estrés también debilita la barrera de tu piel, lo que la hace más propensa a la irritación y la inflamación.
Controlar el estrés es fundamental para mantener la piel equilibrada. Incorporar actividades diarias para aliviar el estrés, como la meditación, el yoga o incluso tomar descansos breves a lo largo del día, puede ayudar a reducir la producción de cortisol. Combine estos hábitos con el uso del gel limpiador beMe , que ayuda a reducir la acumulación de grasa y purifica los poros, manteniendo la piel limpia incluso en momentos de estrés.
2. El estrés debilita la barrera natural de la piel
Cuando estás bajo estrés prolongado, la barrera protectora de tu piel se debilita. Esta barrera normalmente retiene la humedad y protege tu piel de los contaminantes ambientales y las bacterias. Cuando se ve comprometida, tu piel se vuelve más vulnerable a los brotes, la sequedad y la inflamación.
Fortalece la barrera de tu piel con la crema humectante beMe . La crema contiene prebióticos y probióticos que ayudan a restaurar el equilibrio natural de la piel mientras retienen la humedad. Mantenerse hidratado y evitar productos agresivos para el cuidado de la piel también ayuda a mantener la resistencia de la piel.
3. Aumento de la inflamación
El estrés desencadena una respuesta inflamatoria en el cuerpo. Cuando el cuerpo está inflamado, a la piel le resulta más difícil curarse del acné, lo que provoca brotes prolongados y un mayor enrojecimiento. La inflamación inducida por el estrés también puede empeorar afecciones de la piel como el eczema y la rosácea.
Para contrarrestar la inflamación, concéntrese en una rutina que alivie su piel. Después de limpiarla con el gel limpiador beMe , aplique la crema humectante beMe para calmar su piel y reducir la irritación. Incluir más alimentos antiinflamatorios en su dieta, como verduras de hoja verde y pescado graso, también puede ayudar a reducir los efectos del estrés en su piel.
4. El estrés empeora el acné
Si ya tienes acné, el estrés puede empeorarlo al promover la sobreproducción de grasa y ralentizar la capacidad de la piel para sanar. El estrés también puede hacer que sea más probable que te toques o te rasques la piel, lo que puede provocar cicatrices e infecciones.
Para romper este ciclo, concéntrese en calmar la piel y reducir el estrés. Evite tocarse la cara y use SOS Rapid Gel para tratar los brotes rápidamente sin causar más irritación. El gel actúa de manera invisible sobre la piel, ayudando a reducir el enrojecimiento y la inflamación, a la vez que acelera el proceso de curación.
5. Prácticas conscientes para aliviar el estrés
Reducir el estrés no solo es beneficioso para la salud mental, sino que también es esencial para la piel. Cambios sencillos en el estilo de vida, como hacer ejercicio con regularidad, técnicas de respiración profunda y dormir lo suficiente, pueden ayudar a regular los niveles de cortisol y reducir los brotes.
Incorpore el alivio del estrés a su rutina diaria. Comience el día con unos minutos de respiración profunda y relájese por la noche con una rutina relajante de cuidado de la piel utilizando el gel limpiador beMe y la crema humectante beMe . Mantenerse constante con el manejo del estrés y el cuidado de la piel le dará a su piel la mejor oportunidad de mantenerse limpia y saludable.
El estrés tiene un impacto directo en la piel, ya que aumenta la producción de grasa y debilita las defensas naturales de la piel. Si controlas el estrés mediante prácticas conscientes y utilizas los productos adecuados para el cuidado de la piel, puedes minimizar el impacto del estrés en tu piel y mantener una tez más clara y saludable. Incorporar productos como el gel limpiador beMe , la crema hidratante beMe y el gel SOS Rapid a tu rutina te ayudará a proteger tu piel de los brotes y la inflamación provocados por el estrés, manteniéndola equilibrada y tranquila.