Cómo determinar tu tipo de piel

Comprender tu tipo de piel es la base para crear una rutina de cuidado de la piel eficaz. Ya sea que tu piel sea normal, seca, mixta o grasa, conocer sus necesidades específicas te ayudará a tomar las decisiones correctas para tener una piel más limpia y saludable. Con los productos de cuidado de la piel y la rutina paso a paso de beMe, puedes mantener tu piel radiante y equilibrada.

Piel normal

Si tu piel está equilibrada (ni demasiado grasa ni demasiado seca), es probable que tengas una piel normal. Los poros suelen ser pequeños y tu cutis es suave y uniforme. Es posible que sufras brotes ocasionales, pero son poco frecuentes.

Rutina de cuidado de la piel para piel normal :

  1. Limpieza profunda : use el gel limpiador beMe una o dos veces al día para eliminar la suciedad, la grasa y las impurezas. La fórmula probiótica favorece una piel más sana al promover la oxigenación celular.
  2. Hidratante : aplica la crema humectante beMe después de la limpieza para mantener el equilibrio natural de tu piel. Esta fórmula liviana mantiene tu piel hidratada sin obstruir los poros.
  3. Tratamiento localizado : Incluso la piel normal puede sufrir alguna imperfección ocasional. Utilice beMe Correct&Cover durante el día para ocultar y tratar las imperfecciones al mismo tiempo. Para un cuidado más específico, aplique SOS Rapid Gel por la noche para reducir rápidamente el enrojecimiento y la inflamación.

Si bien la piel normal es menos reactiva, no la limpies en exceso ni te saltes la hidratación, ya que ambas son fundamentales para mantener el equilibrio y el brillo de tu piel.

Piel seca

Si a menudo sientes la piel tirante, áspera o escamosa, especialmente después de limpiarla, es probable que tengas piel seca. Este tipo de piel tiende a perder humedad rápidamente y puede verse opaca si no se cuida adecuadamente.

Rutina de cuidado de la piel para piel seca :

  1. Limpieza profunda : utiliza el gel limpiador beMe solo una vez al día, preferiblemente por la noche. Esto garantiza que tu piel permanezca limpia sin eliminar en exceso sus aceites naturales. Por la mañana, un chorrito de agua o un limpiador muy suave puede ser suficiente.
  2. Hidratante : Aplique la crema humectante beMe inmediatamente después de la limpieza y con mayor frecuencia si es necesario durante el día. Su fórmula de hidratación profunda restaura la humedad y ayuda a reparar la barrera cutánea.
  3. Tratamiento localizado : si tienes zonas secas o imperfecciones, aplica el gel SOS Rapid para calmar la inflamación sin resecar aún más la piel. Para una cobertura y protección adicionales, utiliza el Correct&Cover de beMe para reducir el enrojecimiento y disimular las imperfecciones.

La piel seca necesita más hidratación, así que considere aplicar una capa más espesa de humectante por la noche y evite usar exfoliantes agresivos que puedan irritar y empeorar la sequedad.

Piel mixta

La piel mixta se caracteriza por una zona T grasa (frente, nariz y mentón), mientras que las mejillas y otras zonas son normales o secas. Este tipo de piel suele presentar tanto brillos como zonas secas al mismo tiempo.

Rutina de cuidado de la piel para pieles mixtas :

  1. Limpieza profunda : use el gel limpiador beMe dos veces al día, concentrándose más en las áreas grasas (zona T) para mantener los poros limpios y reducir el exceso de grasa. Para las áreas más secas, use un enfoque más suave, asegurándose de no limpiar en exceso.
  2. Hidratante : Aplica la crema humectante beMe en todo el rostro, pero ten cuidado de aplicar menos en la zona T, donde la producción de grasa es mayor. Las propiedades matificantes de esta crema ayudan a controlar el brillo en las áreas grasas mientras mantienen hidratadas las partes más secas.
  3. Tratamiento localizado : utiliza el gel SOS Rapid en las zonas grasas donde sueles experimentar más brotes. Para los días en los que quieras disimular las imperfecciones, aplica Correct&Cover para tratarlas y cubrirlas.

El equilibrio es fundamental para las pieles mixtas. No humedezcas en exceso las zonas grasas ni deshidrates las zonas secas. Adapta tu rutina a las diferentes partes de tu rostro.

Piel grasa

Si tu piel tiende a verse brillante o se siente grasosa al final del día, es probable que tengas piel grasa. Este tipo de piel es propensa a tener poros dilatados, puntos negros y brotes frecuentes.

Rutina de cuidado de la piel para pieles grasas :

  1. Limpieza profunda : usa el gel limpiador beMe dos veces al día para eliminar el exceso de grasa, suciedad e impurezas. Los ingredientes como el ácido salicílico ayudan a purificar los poros y a prevenir los brotes, manteniendo la piel limpia y mate.
  2. Hidratación : aunque parezca contradictorio, la piel grasa necesita hidratación. La crema humectante beMe proporciona una hidratación ligera y ayuda a controlar la producción de grasa con su efecto matificante. Aplícala después de cada limpieza para mantener el equilibrio.
  3. Tratamiento localizado : para controlar rápidamente las imperfecciones, utilice el gel SOS Rapid directamente sobre los granos para reducir el enrojecimiento y la inflamación. El gel es invisible y actúa sin obstruir los poros. Para cubrirlos durante el día, utilice Correct&Cover para ocultar y tratar las imperfecciones al mismo tiempo.

No dejes de hidratarte, incluso si tu piel está grasosa. Si la mantienes hidratada, evitarás que produzca un exceso de grasa, lo que dará como resultado una tez más equilibrada.

Determinar tu tipo de piel es fundamental para crear una rutina que funcione para ti. Si comprendes si tu piel es normal, seca, mixta o grasa, puedes ajustar tu rutina de cuidado de la piel para mantener el equilibrio y que tu piel luzca lo mejor posible.

Con los productos de cuidado de la piel de beMe (limpieza profunda con el gel limpiador beMe , hidratación/humectación con la crema humectante beMe y tratamiento localizado con Correct&Cover y SOS Rapid Gel ) puedes crear una rutina adaptada a tu tipo de piel único, que te ayudará a lograr una piel más saludable, clara y radiante.

Rutina de cuidado de la piel definitiva